Con esta edición son tres las ediciones del concurso de bonsái MBA a las que he asistido y puedo decir que ha sido la mejor de las tres.

Mencionar lo primero el nivel de los bonsáis expuestos, ha sido muy alto, altísimo, será difícil de superar, las presentaciones de  los bonsáis a concurso muy cuidadas, de hecho el día de las criticas no iban dirigidas a los bonsáis sino a los acompañamientos, árbol secundario o kusamono. El museo con todos los árboles espléndidos y la ocasión de poder disfrutar de la colección de Luis Vallejo, merecía la pena el viaje.

A pesar de que en esta ocasión había que pagar, la asistencia de aficionados ha sido masiva, la disposición del espacio en tres amplias zonas, ha contribuido a que estuviéramos más cómodos que en ocasiones anteriores, había espacio para disfrutar viendo los árboles y podías pararte a saludar y a charlar.

Otro acierto ha sido la separación por tamaños, aunque Taiga echó en falta la categoría kifu, que se creó según explicó para agrupar los shohines que son muy potentes y evitar que compitan con los chuhines, la diferencia de tamaño era evidente.

Algo que me ha parecido muy acertado acierto ha sido la publicación de las votaciones, eso elimina toda posible suspicacia.

Todo esto hace que el evento reciba en mi humilde opinión un sobresaliente alto, le ha faltado muy poco para la matrícula de honor.

Una de las sugerencias  que me hicieron llegar varios aficionados que por primera vez se acercaban a Alcobendas, fue la necesidad de un plano indicativo de donde estaba cada punto, quizás incorporado detrás de la entrada, indicando la ubicación del museo, expo y lugar de las demostraciones

En las bases se especificaba que las presentaciones dispondrían de un espacio entre 1,2 y 1,8 m pero eran bastantes los bonsáis que disponían de menos de 1,20 y se notaba. Daba la sensación de estar el kusamono prácticamente debajo del bonsái.



Varios se quejaron también de la falta de puntualidad en las horas indicadas para el comienzo de las actividades. Comentar que yo en una de las demos me di cuenta pasada que me había dejado la batería de la cámara en el hotel, pasaban ya 10 minutos de la hora indicada para el comienzo, volví a por ella y cuando regresé acababan de empezar las demos. También era dificil saber los horarios de apertura y cierre del museo y de la exposición.

Para la crítica de los árboles quizás habría que plantearse hacerla de otra manera ante el interés que despierta este tipo de actividad, hubiera hecho falta un micrófono, las personas que no estaban al lado de Taiga prácticamente no oyeron nada. En la Niemeyer se hizo en un salón mostrando diapositivas de los árboles, pero sé que esta solución no es del agrado de muchos maestros, que prefieren explicar con el bonsái "in situ". Hay que pensar opciones, este tipo de actividad no interesa sólo a los propietarios de los bonsáis, interesa a muchos otros aficionados con ansías de aprender.


Quizás una cosa que si habría que tener en cuenta es la altura de la zona de exposición, sobre todo en el caso de chuhines, la mayoría de los árboles según Taiga tendrían que haber estado más altos, puede que uno o dos tuvieran la mesa demasiado baja, pero si eso es la tónica general,  que es lo que ocurrió a tenor de los comentarios de Taiga, cabe plantearse que la altura de la zona expositora no es la adecuada.


Pero el punto en el que coincidía todo el mundo era el exagerado calor que hacía, si en el exterior estabas con plumífero, dentro podías estar con manga corta sin exagerar, no creo que eso fuera bueno para los bonsáis y las plantas de acento, de hecho según pasaban los días iban empeorando de aspecto. Como ejemplo este pequeño ejemplar, a la izquierda el día 6 por la tarde, llevaba ya mas de 36 horas en el recinto, la de la derecha 24 horas después, supongo que el día 5 estaría  mejor, el día 8 todavía estaba en peores condiciones y el comentario de Taiga fue que así no se lleva un acento.


El día ocho con la aglomeración para escuchar a Taiga, el calor era ya literalmente insoportable, Taiga se quejó de ello y pusieron el aire acondicionado. Algunos nos quedamos pensando, ... ¿pero cómo, hay aire acondicionado? Y estos días por qué no se ha puesto?

Los que estuvisteis sabéis que no exagero cuando digo que el calor era insoportable.

Por estos pequeños detalles creo que para mi esta edición de Alcobendas se queda en sobresaliente alto, le falta un pelín para la matrícula de honor. Pero ha sido GENIAL y pienso volver, aunque meteré camisetas de tirantes por si acaso, creo que no estaría mal tener un guardarropa donde dejar los abrigos y plumíferos.

Debajo tenéis los links a las entradas de estos días post-Alcobendas por si se os ha pasado alguna.

Os dejo con un vídeo con las fotos de todos los bonsáis. Aunque supongo que ya las habréis visto en las redes sociales.



Un abrazo

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