Con este árbol tengo la sensación de estar siempre empezando.  En mayo estaba estupendo.

Aunque decidí dejar crecer una rama para hacer autoinjertos, cada vez veía mas fea la parte superior. En diciembre, Ana vino de visita e inevitablemente salió el tema, la rama que había dejado crecer sobrepasaba el metro y medio de altura, y se dejaba ver, estuvimos comentando la posibilidad de hacer los injertos o cortar más abajo. Así que hace unas dos semanas vi que las yemas estaban hinchando y  decidí que me ponía con él.


Al ir a cogerlo vi que las ramas de la parte superior estaban secas y las corté. Lo siguiente vino rodado.




Estaba decidido, cortaba mas abajo y me quedaba con la parte viva.
En poco tiempo tenía el corte hecho y la rama podada.



En estos días a pesar del frío ha empezado a brotar.



Como mi espacio es muy justo, en otoño lo trasplantaré a una maceta más pequeña.

Un abrazo


Otros temas relacionados:
Acer ginnala, el cambio le gusta.
Acer ginnala, cambio de planes.