Inspira Bonsái 2018: Escuela Bonsái Valencia
viernes, marzo 23, 2018Turno del trabajo de los chicos de Escuela Bonsái Valencia.
En el sorteo les tocó un pino, la mano inocente fue Pascual
El equipo estaba integrado de izquierda a derecha por: Pascual Melero, José Luis Oliver, Jesús Sánchez, Pedro Caparrós, Alberto Gimeno y Pepe Garcia.
Como ya os conté en la entrada del lunes Alberto estuvo ayudando a los amigos de El Kumi.
En mi primera pasada por la mesa que tenían designado estaban dándole vueltas al diseño.
Pedro se puso manos a la obra a arreglar un poco el tocón que quedaba después del corte.
Me fui a ver los otros trabajos y al volver seguían con la madera. Jesús estaba limpiando acícula.
Cuando volví en la siguiente pasada ya eran dos, José Luis y Jesús, los que estaban con la limpieza de aguja y Pedro y Pepe seguían con la madera.
En la siguiente visita me dediqué a hacer fotos de los detalles. Estaban empezando a poner la rafia que había estado preparando Pascual.
Mi siguiente visita coincidió con la colocación de un tornillo necesario para poder colocar una de las ramas hacia adelante.
Llegó la hora de las explicaciones y las preguntas del público, ellos tenían ya el pino muy avanzado. Prueba del buen humor imperante, Pepe encargado de hablar empezó con una broma. "La idea era hacer el árbol con esta rama, pero hemos hecho un poco de fuerza y se nos ha partido, no, es broma. El árbol era mucho más alto, pero hemos visto que el potencial lo tenía aquí abajo, y se ganaba mucho dejando esta altura con respecto al grosor de la base. La idea es crear un árbol compacto que tenga mucha fuerza, hemos elegido este frente porque el frente natural del árbol nos hacia ver un tramo muy rectilíneo, eso nos ha obligado a traernos una rama hacia adelante, eso nos ha obligado a enrafiar, usar un alambre grueso y hacer fuerza, la hemos sujetado con este tensor que nos ayudará a traerla a la posición que queremos. Nos queda posicionar las ramas. Por último aclarar que la rama esta pequeña que queda al lado del tronco la ibamos a quitar, pero hemos pensado que una opción aún más arriesgada que la que nosotros hemos tomado sería hacer el árbol con esta rama, como el árbol no es nuestro hemos preferido no cortarla y dejarla ahí"
En las siguientes fotos podéis apreciar que la rama que habían dejado "por si acaso" estaba cubierta.
El árbol ya estaba listo, les sobraba tiempo para darse una vuelta y ver el resto de los trabajos.
Igual que había ocurrido con algún otro árbol, tuvieron que volver a llevarlo a la mesa para el turno de las respuestas a los maestros. Si os fijáis finalmente quitaron la rama
Un abrazo
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