Este fin de semana debería haber sido el Congreso ABEAEB en Fuenlabrada, yo volvía hoy y mañana montábamos nuestro Belén como todos los años por estas fechas, ya que el Congreso no ha podido ser, aunque algo prepararé, el sábado por la tarde nos pusimos a montar el Belén.

Los habituales y los que me seguís en otras redes sabéis que es grande. Este año marcado por el COVID,  serán unas Navidades distintas, cada uno es muy libre de vivirlas como quiera, pero en nuestro caso tengo claro que el riego que corramos los de casa va a ser 0, no merece la pena, cuando esto pase ya habrá oportunidades de celebrar y reunirse con amigos y familiares. Así que decidí que el Belén también sería distinto. Primero decidí que les pondría mascarillas a las figuras.

Al empezar a desembalar primer susto, el río estaba roto en tres pedazos, sábado por la tarde y sin poder salir de la localidad, intenté repararlo pero fue imposible, así que este año sin río, fabriqué un estante con papel de aluminio y film trasparente, tendría que servir para los patos  y el pescador. Como de costumbre alguna figura necesitaba reparación, este año le tocó a mi hija, yo estaba con lo de las mascarillas.

Josean estaba con las luces, necesitó salir a comprar algo, el bazar chino estaba abierto  y yo mientras tanto pensé poner carteles con la obligatoriedad del uso de mascarillas, al buscar información en internet la cosa se disparó:  Distancia mínima, uso de gel gel hidroalcohólico, aforo máximo permitido, me puse a imprimir y a ponerlas en los sitios claves, las dos posadas, la carpinteria, la panaderia, el puesto de flores y por supuesto, el pesebre.

Todo montado, el domingo a la hora de comer mi hijo sugirió que me faltaba un sitio donde hacer las pcr, así que mientras ellos charlaban, vuelta al ordenador a imprimir, en 5' ya teníamos una casa convertida en centro para pruebas COVID. 

Hay un pastor que se ha quedado sin mascarilla, en el video se ve, ha sido imposible ponersela con la oveja que lleva a cuestas, así que hemos decidido que es el primer vacunado, también habíamos pensado que Herodes fuera el negacionista de turno, pero al final hemos sido buenos y tiene su mascarilla. Al hacer el repaso final nos dimos cuenta que el pescador estaba muy lejos y no le habíamos puesto mascarilla, menos mal que está él solo en su esquina.

A pesar de la situación, ha sido uno de los años más divertidos mientras lo montábamos. Aquí tenéis, reportaje completo. 

Un abrazo