En febrero hará 5 años desde que llegó a casa gracias a la importación de aquel año de Bonsai Sense.
Desde entonces. todos los años me ha regalado sus flores, creo que este año es el que más ha tenido. Los primeros capullos asomaron el 18 de diciembre.
Antes de nochebuena tenía ya dos o tres flores abiertas, pero decidí esperar a que hubiera más para hacer las fotos.
Llegó Filomena, y con el frío dejaron de abrir, ya sabéis que no les cae agua ni nieve encima pero el frío se nota.
Luego llegó el viento y pensé que me quedaba sin flores. Afortunadamente, solo cayeron dos o tres. El domingo vi que había muchas abiertas y decidí hacer las fotos el lunes. Todavía quedaban varias por abrir pero no quería arriesgarme ante las repetidas alertas por vientos.
Mientras hacia las fotos disfrutaba del olor. Sé que hay aficionados que dicen que solo por la floración no merecen la pena, pero disiento totalmente, me encanta disfrutar de ese color y de ese aroma, le duran semanas si no ocurren imprevistos y siempre encuentro algún fruto. Cuando está con hojas al menos, repaso dos o tres veces, porque los crecimientos se disparan mucho. Como se puede apreciar en la foto del árbol completo, necesita una poda, pero la he pospuesto hasta disfrutar de la floración.